Organizar un festival está muy de moda, y son pocas las localidades españolas que no tienen uno propio, muchas veces con un éxito arrollador, tanto que se sigue celebrando año tras año.
No es sencillo preparar uno de estos festivales, en especial el primer año, pero nosotros podemos ayudarte con todos los productos que tenemos disponibles.
Cuando pensamos en cómo crear un festival de música, lo primero es el escenario. Si se trata de un festival nuevo, siempre es una buena idea alquilarlo y nosotros disponemos de ese servicio, ya que alquilamos escenarios homologados por toda Europa.
Alquiler de escenarios para festivales de música
Existe una línea que ha sido fabricada específicamente para los conciertos y los festivales, con un sistema modular patentado que hace que el montaje sea muy sencillo y rápido, algo que es muy necesario en los eventos.
Además, nuestro equipo se encarga del envío del escenario y también pueden hacer las tareas de montaje y desmontaje, por lo que, por este lado, la organización no tendrá que preocuparse de nada.
Hay que buscar un terreno
Si no se sabe cómo se organiza un festival de música, es muy posible que se conceda poca importancia al terreno, pero lo cierto es que este es crucial, tanto que puede llevar a que el esfuerzo que conlleva crear este evento no sirva de nada.
Necesitamos un sitio lo más plano posible, y con unas dimensiones adecuadas para que quepa un escenario, o varios, y los miles de personas que suelen acudir a los festivales, todo ello sin agobios. Nunca hay que olvidar que debe poseer buenos accesos y que tienen que ser amplios para que los camiones puedan entrar con los materiales.
También hay que tener en cuenta que la mayoría de los asistentes van a acampar si el festival dura varios días y que llegarán en coche o furgoneta, que tendrán que aparcar en alguna parte.
El terreno suele ser un campo sin asfaltar, por lo que lo natural es que esté lleno de hierba y convendría incluso fumigar contra los parásitos después de cortarla toda.
¿Cuánto personal se necesita?
Dependiendo del tamaño del festival que vayamos a organizar, y sobre todo de los músicos que seamos capaces de llevar, es normal que la afluencia supere las 500 personas diarias y eso en los eventos más pequeños.
Por eso, hay que contar con seguridad privada dentro del recinto, limpiadoras que no paren durante todo el día, gente que ayude a los músicos, que dé información a los asistentes e incluso una ambulancia, dependiendo del número de personas que acudan y de la comunidad en la que nos encontremos.
Debemos ser capaces de tener a ese personal contratado en esas fechas en concreto y estar preparados por si alguno falla, lo que es normal al no ser un trabajo fijo.
Se deben solicitar los permisos con tiempo
No se puede pensar en organizar un festival y hacerlo sin más, sino que hay que solicitar varios permisos, que además suelen ser diferentes dependiendo de la comunidad autónoma en la que vivamos.
Nos pueden informar en nuestro ayuntamiento, pero siempre conviene pedirlos con antelación, ya que no es algo que se dé en una semana, pues tienen que intervenir muchas personas, coordinar a fuerzas de seguridad, entregar una cantidad enorme de documentación, etc.
Es quizá la parte más compleja de todas, pues nos vamos a topar con la burocracia que no siempre es rápida ni diligente.
Contratar a los grupos
Organizar un festival no es posible sin los grupos de música. Aunque hagamos actividades paralelas, lo cierto es que lo que atrae al público es la música, de manera que hay que invertir una buena cantidad de dinero en ello.
Dependiendo del presupuesto, se puede contratar a grupos con más caché, aunque lo que se suele hacer es llevar uno o dos “de los grandes” a los que acompañan otros conocidos, pero que cobran menos.
Se puede aprovechar la ocasión para dar la oportunidad a grupos de la zona, algo que gusta mucho a los asistentes que siempre quieren conocer a músicos nuevos.
¿De dónde obtenemos la financiación?
Por último, es más que probable que no sepamos cómo crear un festival de música, pero sí que todo lo mencionado cuesta dinero.
Habrá que comenzar a buscar financiación desde el principio, poniendo recursos propios, yendo a hablar con los bancos y recabando todas las ayudas que nos puedan dar en la comunidad autónoma, ayuntamiento, etc., pues al fin y al cabo los asistentes gastarán dinero en la zona.
Organizar un festival conlleva mucho trabajo y una enorme responsabilidad. Hay que comenzar por alquilar uno de nuestros escenarios y seguir con una serie de trámites burocráticos, que tardan un tiempo, además de buscar los terrenos, el dinero con el que pagarlo todo, el personal y los grupos.
