El teatro es una de las mejores experiencias que podemos vivir, y si vamos a ver una obra vamos a disfrutar aún más si conocemos las partes del escenario, pues así entenderemos mucho mejor la dificultad que entraña para los actores.
A la hora de fabricar nuestros productos, tenemos muy en cuenta las partes de un escenario de teatro, ya que los escenarios, tarimas, gradas y tribunas que tenemos se utilizan en muchos casos para hacer representaciones.
En el teatro, las partes del escenario siempre son las mismas, aunque es cierto que han ido evolucionando con el tiempo, de forma que algunas de ellas ya apenas se ven o han sido sustituidas por otras.
Es la parte que va desde el borde del escenario, el que pega con el patio de butacas, hasta el telón delantero y lo que los espectadores llaman tablas o escena de forma incorrecta, al no conocer el resto de las partes.
Nuestros escenarios no la llevan y es que ya no se ve en los teatros. Era una especie de concha en la que el apuntador se colocaba oculto al público. Desde ella, ayudaba a los actores cuando se les olvidaba el texto.
Aquí los artistas representan la obra ante el público. De cara a desarrollar el trabajo escénico, los directores lo subdividen en tres zonas, la izquierda, la derecha y el centro, de forma que los actores saben dónde se deben situar en cada momento.
Algo que caracteriza al teatro es el directo, por lo que los cómicos, como se los llamaba antes, tienen que entrar y salir a lo largo de la obra, algo que hacen por el escotillón, una trampilla que está abierta para facilitarles el trabajo y que las transiciones sean rápidas.
Todas las obras de teatro se dividen en actos, los cuales se separan con el telón, una cortina enorme que se baja y se sube a voluntad. Con ella bajada, se anuncia el final de un acto, lo que da tiempo al público a descansar, a los actores a prepararse y al equipo técnico a acondicionar la escena.
A los lados del escenario, tenemos los bastidores, otra de las zonas por la que los actores entran y salen, aunque menos escondida que el escotillón. De hecho, con el fin de que las transiciones no sean bruscas, muchos directores los integran en el decorado.
Al igual que la concha del apuntador, es una de las partes que está en desuso. Se colocaba en los teatros fijos, no se puede usar en los escenarios que nosotros vendemos o alquilamos, debajo de las tablas y ahí estaban colgados los elementos de la decoración que pesaban mucho.
Esta barra se sitúa en la parte superior del escenario, sujeta con una estructura, y en ella se cuelgan todas las luces necesarias a la hora de iluminar la escena. Es un accesorio que sí que llevan nuestros escenarios.
Similar a la anterior, pero en ella no se ponen las luces, sino que se cuelgan los elementos escenográficos necesarios para el desarrollo de la representación, los cuales se pueden retirar de una manera sencilla cuando se baja el telón y acaba un acto.
Otro elemento muy famoso, ya que el nombre forma parte de la cultura popular, empleándose en varias situaciones que no tienen que ver con el teatro.
Es una máquina que permite realizar los cambios de la decoración y que produce los efectos en la escena, y la maneja un profesional que se llama tramoyista y que es muy apreciado en el mundillo.
En ella, podemos encontrar los contrapesos y las cuerdas de contrapesos, con las cuales el tramoyista sube o baja los diferentes elementos, aunque ahora ya se suelen utilizar los motores eléctricos, puesto que son mucho más precisos.
Dentro del escenario y sus partes, también encontramos al bambalinón, un telón horizontal colgado del techo, cuya misión es meramente estética, reduciendo el tamaño de la escena.
Hay que tener en cuenta que en el teatro no se puede jugar con los efectos visuales como en el cine, de forma que se tienen que recurrir a trucos de siempre y a usar la perspectiva, con lo que se ve desde el patio de butacas, etc.
La ambientación de una representación de teatro es muy importante y el ciclorama se la da, puesto que es la pintura o el telón que decora la obra que consigue que la inmersión del espectador sea mayor.
Esas son las partes de un escenario de teatro, algunas de las cuales ha dejado obsoletas la tecnología. En los escenarios que nosotros vendemos y alquilamos, se pueden desarrollar estas obras y representaciones teatrales, por lo que si necesitas un escenario teatral, ponte en contacto con nosotros y te ayudaremos sin compromiso.